Deconstruyendo los mitos sobre la salsa picante
Cuando pensás en picante, ¿qué es lo primero que te viene a la mente? Supongamos que la selección aleatoria de palabras puede incluir «sabor artificial», «picante y mata las papilas gustativas» y «no es para la cocina diaria». Si bien esta podría ser una opinión popular, profundicemos en por qué la salsa picante tiene una reputación tan incierta.
Echemos un vistazo a los ingredientes de la salsa picante Blue Zones y comprendamos cómo eleva nuestra comida. La mayoría de salsas picantes Blue Zones Nicoya no contienen gluten, son 100% natural, sin conservantes ni azúcar añadidos, y cuando los ingredientes son frescos, no hay duda de que la salsa será mortal. La salsa picante Nalga De Perro está hecha de chiles Cayena que son muy communes y populares, mientras que la salsa picante Conbirra tiene pimientos Congo, nativos de la Península de Nicoya.
Una buena salsa picante tiene que tener cualidades que van desde ahumadas, picantes, ligeramente dulces con diferentes niveles de picor, de leves a muy muy picantes. Los ingredientes principales de las salsas picante son: pimientos, vinagre, sal, verduras y algún tipo de cítricos: pomelo, naranja, lima o limón. Aveces incluyen frutas para balancear el picor.
No son los pimientos en sí los que deberían ser el foco principal, es la capsaicina la que saca el picor del pimiento. Los capsaicinoides son los químicos responsables del sabor «picante» de los chiles. Mientras que para algunos los chiles dejan una sensación de ardor en la lengua, la capsaicina tiene numerosos efectos sobre la salud. Este componente ayuda a eliminar las migrañas, aclara la secreción nasal, acelera el metabolismo y también es un súper ingrediente que se encuentra en las cremas y lociones para calmar la artritis.
La salsa picante a menudo se llama conservante, ¡la razón es que los pimientos picantes son antimicrobianos naturales, a.k.a., matan los gérmenes que podrían estar presentes en la botella o en una lata! Justo cuando pensabamos que el título de vitamina C es para las naranjas, ¡el pimiento suave y los pimientos ardientes contienen el doble de la cantidad de vitamina C que protege tus células!
Llámalo chile, shatta o mirchi: varias culturas de todo el mundo se han adaptado a su propio estilo de salsa picante según el origen. Se dice que los habitantes de México, América Central y América del Sur comenzaron a consumir picantes hace más de 6000 años. La Zona Azul de Nicoya, Costa Rica tiene una de las poblaciones vivas más viejas y saludables y no es ningún secreto que su tradicional Chilero es un factor que contribuye a la longevidad.
Crecemos comiendo alimentos de nuestra cultura, pero eventualmente nuestro gusto y tolerancia a las especias evoluciona mucho al probar diferentes cocinas. Entonces, la próxima vez que prepares tus huevos revueltos para el desayuno, ¡saquemos esa salsa picante!